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Un gran vacío de datos pone a los niños refugiados, migrantes y desplazados en peligro y les deja sin acceso a los servicios básicos

Se estima que 28 millones de niños vivían en situación de desplazamiento forzado en 2016, pero la cifra real es probablemente mucho mayor.

NUEVA YORK, 15 de febrero 2018 - Los vacíos en los datos sobre los refugiados, los solicitantes de asilo, los migrantes y las poblaciones internamente desplazadas ponen en peligro la vida y el bienestar de millones de niños en tránsito, advirtieron hoy cinco organismos de las Naciones Unidas y sus asociados. En "A call to action: Protecting children on the move starts with better data" (Un llamamiento a la acción: Proteger a los niños en tránsito comienza por obtener mejores datos) UNICEF, ACNUR, la OIM, Eurostat y la OCDE demuestran la importancia crucial de los datos para comprender los patrones de la migración mundial y establecer políticas dirigidas a apoyar a los grupos vulnerables, como por ejemplo los niños.

El llamado a la acción confirma que existen vacíos alarmantes en la disponibilidad, confiabilidad, oportunidad y accesibilidad de datos y pruebas, dos elementos esenciales para entender cómo la migración y el desplazamiento forzado afectan a los niños y sus familias. Por ejemplo:

- Solo existe información registrada sobre la edad del 56% de la población de refugiados que se hallan bajo el mandato del ACNUR;
- Solo el 20% de los países o territorios desglosan por edad sus datos sobre personas internamente desplazadas a causa de un conflicto;
- Casi una cuarta parte de los países y territorios no cuenta con datos desglosados por edad sobre los migrantes, incluido el 43% de los países y territorios de África; y
- La falta de información sobre los niños migrantes y desplazados les priva de la protección y los servicios que necesitan.
"Los vacíos en la información socavan de manera fundamental nuestra capacidad de ayudar a los niños", dijo Laurence Chandy, Director de UNICEF de la División de Datos, Investigación y Políticas. "Los niños migrantes, en particular los que migran solos, son a menudo blancos fáciles de aquellos que pueden hacerles daño. No es posible mantener a los niños seguros y brindarles servicios que salvan vidas, tanto cuando se encuentran en tránsito como cuando llegan a su destino, si no sabemos quiénes son, dónde están o qué necesitan. Instamos a los Estados Miembros a colmar estos vacíos con datos desagregados fiables y a mejorar la cooperación para que los datos se compartan y sean comparables".

"Muchos niños refugiados han sufrido o presenciado casos espantosos de violencia y sufrimientos en sus países de origen y, a veces, también durante su huida en busca de protección y seguridad. Necesitan y merecen atención y protección, pero para poder proporcionárselas es preciso disponer de datos sobre su identidad y sus necesidades. En ninguna esfera la coordinación de los datos y el fortalecimiento de la capacidad es más importante que en el caso de los niños, especialmente los más vulnerables", dijo Volker Türk, Alto Comisionado Adjunto de Protección del ACNUR.

"Necesitamos datos fiables y mejores sobre los niños migrantes para protegerlos y garantizar sus intereses. El desglose de datos por edad, sexo y origen puede servir de información a los responsables de las políticas sobre las necesidades reales de los niños migrantes. Esto asegurará que ningún niño se quede atrás y que no sean explotados. Todos los niños migrantes tienen derecho a recibir atención y protección, independientemente de su estado migratorio", dijo el Director General de la OIM, William Lacy Swing.

"El tiempo es esencial en lo que respecta a la integración en la educación", dijo el Director de Empleo y Asuntos Sociales de la OCDE, Stefano Scarpetta. "El éxito o el fracaso a esta edad tan vulnerable puede tener consecuencias de por vida en el mercado laboral. Solo con un conocimiento integral, respaldado por datos apropiados, podemos determinar y abordar las necesidades de estos niños, protegerlos mejor y desarrollar sus aptitudes y capacidades a medida que se abren camino a través del sistema escolar y en el mercado laboral".

En muchos países, los datos nacionales disponibles no incluyen información sobre la edad, el sexo y el origen de los migrantes y los refugiados, o si viajan solos o con sus familias. Los diferentes criterios para las categorías de edad y para la recodificación de datos hacen que el desglose sea muy problemático.

Esto lleva a que resulte muy difícil estimar con precisión cuántos niños están en tránsito en todo el mundo. Los datos sobre los niños que se trasladan sin documentos a través de las fronteras, los desplazados o los que migran internamente, o los niños a quienes los padres migrantes dejan atrás, son aún más escasos.

Si bien gran parte de la migración mundial es positiva, y los niños y sus familias se trasladan de manera voluntaria y segura, la experiencia de millones de niños no es voluntaria ni segura, sino que está plagada de riesgos y peligros. Los niños que no tienen acceso a itinerarios migratorios seguros y sistemáticos recurren con frecuencia a rutas irregulares y peligrosas, poniéndolos en peligro de sufrir actos de violencia, abuso y explotación. Muchos niños pierden la vida utilizando peligrosas rutas migratorias informales, ahogados en el mar o perdidos en el desierto, pero sus muertes a menudo ni se denuncian ni se contabilizan.

En 2016, más de 12 millones de niños de todo el mundo vivían como refugiados o eran solicitantes de asilo, mientras que se estima que 23 millones de niños vivían en situación de desplazamiento interno: 16 millones como resultado de un conflicto y 7 millones debido a desastres naturales. Sin embargo, la verdadera cantidad de niños expulsados de sus hogares sigue siendo desconocida y es probable que sea bastante más elevada que la estimación, debido a los vacíos en los informes y los datos.

En ausencia de datos fiables, los riesgos y vulnerabilidades que enfrentan los niños en tránsito permanecen ocultos y no se abordan como debieran. En algunos contextos, los niños que cruzan las fronteras de manera irregular pueden ser detenidos junto con adultos o se les impide acceder a servicios que son esenciales para su desarrollo saludable, como la educación y la atención médica. Incluso en los países de altos ingresos se desconoce el número de niños refugiados y migrantes fuera de la escuela porque no se les cuenta.

La necesidad de una mejor recopilación y análisis de datos son características clave de dos documentos relacionados entre sí, aunque diferentes: el Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular y el Pacto Mundial sobre Refugiados, que se están debatiendo para su aprobación en 2018. Si bien se están realizando esfuerzos para reforzar la recopilación y el análisis de datos tanto a nivel mundial como nacional, aún queda mucho por hacer. A medida que los Estados Miembros trabajan para finalizar estos dos acuerdos, los cinco organismos y sus asociados les instan a abordar los vacíos en las pruebas e incluir los derechos, la protección y el bienestar de los niños como compromisos centrales en los textos finales. Si no se abordan estos vacíos será imposible aplicar y supervisar los Pactos y las consecuencias que podrían tener para los niños en tránsito.

Descargue "Un llamamiento a la acción (en inglés)" aquí: http://uni.cf/2EzKqYe

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Para obtener más información, sírvase dirigirse a:

Christopher Tidey, UNICEF Nueva York, ctidey@unicef.org, +1 917 340 3017

Jorge Galindo, Sede de la OIM, jgalindo@iom.int, +41 7179205

Stylia Kampani, OIM GMDAC, skampani@iom.int, +49 3027877816

Spencer Wilson, OCDE, spencer.wilson@oecd.org, +33 1 45 24 81 18