Migración y Cambio Climático

América Latina y el Caribe es una región altamente expuesta, vulnerable y fuertemente impactada por el cambio climático, la degradación ambiental y los desastres; una situación amplificada por la desigualdad estructural, la dependencia a las economías vinculadas a los recursos naturales y la alta densidad de población en áreas expuestas. 

La reducción de la disponibilidad de agua afecta  los medios de vida, la degradación de la tierra y los riesgos climáticos repentinos o graduales, entre otros, interactúan con otros factores (económicos, políticos y sociales), influenciando los patrones de movilidad humana. La creciente ocurrencia y gravedad de sequías, tormentas tropicales, huracanes y fuertes lluvias que provocan deslizamientos de tierra e inundaciones han amplificado los movimientos internos. Según el IDMC, las Américas registraron 2,1 millones de nuevos desplazamientos internos por desastres en 2023.  

Los modelos climáticos muestran que algunas regiones secas se volverán aún más áridas en las próximas décadas, aumentando la presión sobre los medios de vida. El aumento del nivel del mar y la erosión costera reducen la habitabilidad y afectan actividades como la pesca y el turismo. El IPCC plantea que la migración y los desplazamientos relacionados con el cambio climático tendrán tendencia a aumentar en las próximas décadas.  

Las proyecciones actuales vinculadas al cambio climático ponen de relieve la necesidad de avanzar con estrategias de adaptación, gestión del riesgo, ordenamiento territorial, establecimiento de vías seguras, ordenadas y regulares para promover comunidades resilientes y evitar la movilidad forzada o en condiciones de vulnerabilidad.   

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), como agencia líder intergubernamental del ámbito de la migración, ha estado al frente de los esfuerzos operativos, de investigación, de promoción y de incidencia con el objetivo de instalar la migración ambiental en el centro de las inquietudes internacionales, regionales y nacionales, en cooperación con sus Estados Miembros, observadores y asociados. 

Las actividades de la OIM en esta temática se enmarcan en la Estrategia Institucional sobre Migración, Ambiente y Cambio Climático 2021-2030. La Estrategia Institucional define tres objetivos estratégicos: (a) la formulación de soluciones para facilitar el movimiento de personas; (b) la formulación de soluciones para las personas en movimiento; (c) y la formulación de soluciones para que las personas no tengan que migrar. 
  
En este sentido, la OIM ha venido implementado actividades de investigación, desarrollo de capacidades, formulación de políticas y apoyo operacional en la región para mejorar el abordaje de la migración ambiental y climática. Cuenta con la colaboración de una amplia gama de socios en esta área temática, incluyendo a entidades gubernamentales, organizaciones de la sociedad civil, academia, procesos regionales y agencias intergubernamentales y de las Naciones Unidas. 

El Mandato de la OIM

Desde 2007, los Estados Miembros le solicitaron a la OIM dentro de sus organismos de gobierno que trabajara las dinámicas relativas a la  migración, medio ambiente y cambio climático. A principios de 2015, una División dedicada enteramente a la Migración, Ambiente y Cambio Climático (MECC) fue creada para el abordaje del nexo entre la migración, el ambiente y el clima. 

Este cambio institucional ha formalizado la participación de la OIM en esta área, que se convirtió en la primera organización internacional que estableció una unidad institucional completamente dedicada a este tema. 

Visión de la OIM

La OIM reconoce la necesidad de aumentar los esfuerzos nacionales, regionales e internacionales para abordar los desafíos a la movilidad humana asociados con factores ambientales y con el cambio climático. La visión de la OIM en esta área es que la gobernanza contemporánea de la migración, las políticas y las prácticas deben reflejar la significancia de los factores ambientales, los desastres y el cambio climático sobre la movilidad humana. Los factores ambientales deben integrarse en todas las áreas de la gestión de la migración, tales como la prevención, la preparación y la respuesta al desplazamiento, gestión de fronteras, migración laboral e integración, y retorno y reintegración.

Objetivos de la OIM

Los objetivos de la OIM relacionados con la migración, el ambiente y el cambio climático son:

• Evitar la migración forzosa que deriva de factores ambientales en la medida de lo posible.
• Brindar asistencia y protección a las poblaciones afectadas cuando la migración forzosa realmente ocurre en situaciones de cambio ambiental y climático, y buscar soluciones duraderas a su situación.
• Facilitar la migración en el contexto de la adaptación al cambio climático y mejorar la resiliencia de las comunidades afectadas.

El desarrollo sostenible es reconocido como una parte integral de este enfoque, implementado a través de medidas para la reducción de riesgos de desastre, adaptación al cambio climático y sostenibilidad medioambiental.