La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) lamenta profundamente otra tragedia en aguas del Caribe. El domingo 24 de julio al menos 17 personas de origen haitiano murieron y unas 15 más desaparecieron al volcar una embarcación a 11 kilómetros de la costa de la isla de Nueva Providencia (Bahamas). Los guardacostas de Bahamas rescataron a 23 migrantes haitianos y a dos bahameños.

La OIM expresa sus profundas condolencias a las familias y amigos de los fallecidos o desaparecidos en este incidente.

Esta nueva tragedia eleva a 138 el número de migrantes que han perdido la vida en el Caribe en lo que va de este año, según el Proyecto de Migrantes Desaparecidos de la OIM. Según la misma fuente, 481 personas han muerto durante sus viajes migratorios entre enero de 2020 y hoy en esta misma región.

La OIM reitera su llamado a los gobiernos de la región para que refuercen la coordinación internacional para salvar vidas, fortalezcan las respuestas al tráfico de migrantes y a la trata de personas, y optimicen la disponibilidad y flexibilidad de vías para la migración regular.

La necesidad de una mayor acción para salvar vidas de personas migrantes fue abordada en una reciente declaración firmada por los responsables de la Red de Naciones Unidas sobre Migración. En ella se subraya la necesidad de asumir urgentemente la responsabilidad colectiva de salvar vidas, buscar e identificar a los desaparecidos y asistir a sus familias, en consonancia con el Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular y con las obligaciones pertinentes contempladas por el derecho internacional.

La OIM está atenta a apoyar a los gobiernos para que la migración sea segura y digna, apoyando a los migrantes y a las comunidades en situaciones vulnerables, y abordando los factores adversos que dan origen a la migración irregular y al desplazamiento.